La madera es uno de los elementos antiquísimos empleado en la elaboración de viviendas, siendo su gran capacidad aislante y su posibilidad de diseños dos de las características más apreciadas sobre este material. Por esta razón, planteamos una solución perfecta para este verano: ventanas de madera – PVC de Finstral. Una combinación que, en interior favorece la creación de un ambiente hogareño y rústico y, en exterior, precisa de un escaso mantenimiento protegiendo la vivienda contra el deterioro de la madera.
Así, la sostenibilidad y el respeto con el medio ambiente, se convierten en dos componentes innatos de estos modelos, pues su fabricación renovable hace de las edificaciones un lugar mucho más especial y eficiente en cuanto a ahorro energético se refiere. De hecho, el aislamiento acústico y térmico caracteriza estas ventanas siendo un producto único de alta calidad.